Denuncia de CC.OO: ‘¡Este CAID es una ruina!’ Goteras en otoño

«Menos mal que el edificio pertenece a la Delegación de Salud y Consumo, porque más bien es un centro que “consume la salud” de las y los trabajadores».
«No ha habido Trabajadora Social ni médicos en varias semanas; hay grietas y peligro por el mal estado del centro».

«En anteriores boletines hemos informado del lamentable estado en el que se encuentra el edificio del Centro de Atención y Prevención de Drogodependencias (CAID). Ya han llegado las primeras lluvias del otoño y con ello las primeras goteras». Lo afirma la sección sindical de CC.OO en el Ayuntamiento.

ULEG y CC.OO llevan tres años denunciando la decadencia y el deterioro del CAID, situado en la calle Vicente Aleixandre, detrás del centro Rosa Luxemburgo. El equipo de Gobierno (PSOE-IU) no reacciona y cada vez está en peor estado.

Esta es la crónica del sindicato sobre la dejadez municipal:

«Se ha enviado a los pintores para que comiencen a pintar los despachos de las y los trabajadores. Pero no hay que entender mucho de pintura para saber que no se puede
(debe) pintar sin antes arreglar los techos y paredes con desperfectos de goteras anteriores, que siguen con sus grietas y con los boquetes que se hicieron para medir la apertura de dichas grietas, en fin…, quieren lavar la cara a un edificio que se cae a trozos y no cumple con las condiciones de habitabilidad propias de un centro
socio-sanitario; es como dice el refrán en casa del herrero cuchillo de palo».

«Menos mal que el edificio pertenece a la Delegación de Salud y Consumo, porque más bien es un centro que “consume la salud” de las y los trabajadores, ocasionando
accidentes laborales por el estado del edificio, y por las condiciones de ansiedad y estrés en las que se trabaja en ocasiones, además de no cumplir con muchas de las
indicaciones se explicitan en el estudio sobre riesgos laborales realizado desde Salud Laboral.

Estamos a la espera de que en breve el inspector de trabajo tome cartas en el asunto, tras la visita que realizó a dicho centro y del que ha pedido informes técnicos para garantizar la seguridad de las y los trabajadores. Claro que a ver quién es el valiente que los firma, porque por allí pocos técnicos han pasado para hacer el seguimiento de las grietas.

A todo lo anterior tenemos que añadir el abandono continuado que sufre el servicio, e indirectamente los pacientes a los que atienden, puesto que siguen sin cubrirse las bajas laborales y los permisos.

Este verano durante el mes de agosto llegó a estar un solo trabajador haciéndose cargo de todo el programa de asistencia, y por tanto, de todos los drogodependientes de este municipio; todavía no sabemos cómo pudo sobrevivir el compañero a esta situación, ha sido todo un héroe.

No ha habido Trabajadora Social ni médicos en varias semanas y la única solución que se ha buscado, en vez de cubrir el servicio con trabajadores de las bolsas, ha sido parchear una vez más, pidiendo ayuda a los profesionales de CAID de otros municipios para atender a los drogodependientes de Leganés.

Os tendremos informados del dictamen del inspector y de las medidas que considere necesarias tomar, que esperemos acaben cuanto antes con este calvario, porque como dice el titular, este CAID es una ruina».